Portada: Monero Jerge
(19 DE NOVIEMBRE, 2024).-El día de ayer, el Ministerio de Defensa Rusa, confirmó el uso de misiles balísticos de largo alcance ATACMS (Sistemas de Misiles Tácticos del Ejército) por parte de Ucrania. Esta declaración se realizó después de que la madrugada del domingo, seis misiles ATACMS fueron lanzados contra la región de Bryansk en Rusia, de los cuales cinco fueron interceptados por los sistemas de defensa aérea S-400 y Panstsir, mientras que un sexto misil resultó dañado, provocando que sus fragmentos incendiaran una instalación militar en la región, sin víctimas ni daños significativos, según autoridades rusas.
Esto levanta las sospechas sobre si el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, a pocos meses de terminar su administración había levantado la restricción que impedía a Ucrania utilizar misiles de largo alcance para atacar posiciones dentro del territorio ruso. Esta autorización marcaría un cambio significativo en la política estadounidense sobre este conflicto y podría reflejar una nueva fase en la guerra Rusia-Ucrania.
Por su parte, el gobierno ruso calificó de “imprudente” la autorización de Estados Unidos, asegurando que Rusia responderá en consecuencia. Esta declaración se realiza en un contexto donde, el líder ruso, Vladimir Putin, ya había advertido en septiembre que cualquier ataque con misiles de largo alcance dentro de Rusia sería considerado como una “participación directa” de los países de la OTAN en el conflicto y que no se dudaría recurrir a armas nucleares.
Los misiles ATACMS, fabricados por Lockheed Martin, tienen un alcance de hasta 300 kilómetros y son conocidos por su velocidad y capacidad de penetración, lo que los hace difíciles de interceptar. Estos misiles ya fueron utilizados anteriormente en ataques contra Crimea ocupada por Rusia, y ahora se espera que Ucrania los emplee en áreas más profundas dentro de Rusia, específicamente en la región de Kursk, donde se están concentrando tropas rusas y norcoreanas.
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